Luego de su Extensión de Vida, la central cordobesa logró su primera criticidad el pasado 4 de enero y retornó al servicio a fines de mayo. ENULA estuvo presente en el acto oficial que celebró este último hito, coronando el éxito de un proyecto que hizo lucir al sector nuclear nacional.
Pasadas las 10 a.m. de este jueves 30 de mayo, el staff de Nucleoeléctrica Argentina nos recibe en el aeropuerto de la Ciudad de Córdoba. La combi ya está lista para emprender el viaje hacia Embalse, ciudad de la costa sur del embalse del Río Tercero, donde se aloja la central nuclear homónima, que junto con las bonaerenses Atucha I y II conforman el parque nucleoeléctrico nacional.
Nos alejamos de las inmediaciones del aeropuerto de la capital cordobesa dando inicio a un trayecto de aproximadamente dos horas. El vehículo, que lleva la insignia de NA-SA estampada en sus laterales, se convertirá durante casi 120 minutos en un cálido recinto para escaparse de las bajas temperaturas. Llanura, campos sembrados y un cielo encapotado se dejan ver por la ventanilla tras unos cuantos kilómetros transitados hasta que, finalmente, llegamos a destino.
Tras la acreditación, Embalse nos da la bienvenida con una elegante carpa donde se exhiben gigantografías de la planta y donde se celebra un almuerzo para los invitados: empresarios, expertos del sistema nuclear nacional e internacional, funcionarios y prensa. Todos reunidos para festejar que la central nuclear cordobesa ha vuelto al servicio en forma oficial luego de su proyecto de Extensión de Vida, que se prolongó durante 3 años –tal el cronograma previsto- y supuso una inversión de 2.149 millones de dólares.
Embalse fue la tercera central del mundo del tipo CANDU en extender su vida útil, y la primera en lograr una renovación integral de todos sus componentes críticos. El éxito de esa ambiciosa iniciativa –que implicó enormes retos para el sistema nuclear argentino- puso en evidencia las capacidades de la industria nacional, que supo hacerse cargo de una de las obras ingenieriles más grandes de los últimos tiempos.
El saldo: tres décadas más de funcionamiento de una de las centrales que mejor rendimiento ha mostrado a nivel mundial; un aumento de potencia del 6%, de 648 a 683 MWe, (que en total permite suministrar energía eléctrica para más de 3 millones de personas); 30 años más de producción del isótopo Cobalto 60; y como si fuera poco, la expresión fáctica de la madurez del sector nuclear argentino (el pico de las obras empleó a más de 3.000 personas).
El acto
Llegada la tarde se hicieron presentes los funcionarios. La ceremonia estuvo encabezada por el secretario de Energía de la Nación, Gustavo Lopetegui; el subsecretario de Energía Nuclear y presidente de Nucleoeléctrica Argentina, Julián Gadano; y el director del Proyecto Extensión de Vida de la Central Nuclear Embalse, Omar Semmoloni.
“Este es un ejemplo de lo que tenemos que hacer. Cuando dejamos que la gente libere sus capacidades, podemos hacer cosas como estas, que son maravillosas”, subrayó Lopetegui.
Por su parte, Gadano remarcó: “Hoy es un día de alegría. Esto es real, se hizo en tiempo y presupuesto. Se logró gracias a que quienes intervinieron se vincularon honestamente con su trabajo y brindaron su conocimiento para hacer esto posible”. Además, el subsecretario y titular de Nucleoeléctrica hizo hincapié en las capacidades con las que cuenta la empresa y la necesidad de “convertirlas en valor agregado para poder venderlas al mundo”. “Este es nuestro desafío institucional. Debemos hacer valer los conocimientos que ha acumulado la compañía a lo largo de estos años”, precisó.
Finalmente, en diálogo con EnHOY, Gadano volvió a expresar su satisfacción por la calidad que se logró en el proyecto de Extensión de Vida de Embalse y se mostró optimista sobre el futuro nuclear del país: “Durante tres años, en cumplimiento con el cronograma pautado, se llevó a cabo una de las obras nucleares más importantes, no sólo en el plano nacional sino también internacional. Hubo mucha experiencia técnica expresada en cada trabajo realizado, y por eso nos sentimos orgullosos. Creo que toda la Argentina debería sentirse así: no cualquier país está en condiciones de hacerse cargo de semejante desafío. Esto pronostica un futuro nuclear muy interesante para la Argentina, porque el conocimiento ya es nuestro y hemos sumado un nuevo hito en nuestra rica historia nuclear”, reflexionó el funcionario.
En cuando a lo que será la cuarta central nuclear del país, si bien Gadano no pudo adelantar información sobre las negociaciones que se están haciendo con China, advirtió que “es muy importante que sumemos una nueva planta a nuestro parque nucleoeléctrico” y que “pronto habrá novedades”.
Central Nuclear Embalse: Hitos más relevantes
- El 13 de Marzo de 2016 se cumplió el 33º Aniversario de la Primera Criticidad de la Central Nuclear Embalse. Con esto se celebra la primera ocasión en que la central nuclear del interior del país comenzó a producir energía eléctrica, en marzo de 1983.
- El 6 de noviembre de 1967, la Empresa Provincial de Energía de Córdoba (EPEC) le encomendó a CNEA la ejecución de un “Estudio de pre inversión de una Central Nuclear”, finalizado en 1968.
- El 20 de diciembre de 1973, con el Decreto Ley 20498/73, se declaró de interés nacional la construcción y puesta en servicio de una Central Nuclear en la Provincia de Córdoba. Se dispuso a CNEA como Órgano de Aplicación tomando a su cargo todo lo concerniente al Proyecto con plena representación del Estado Nacional Argentino.
- El contrato entre CNEA–AECL–ITALIMPIANTI fue aprobado por el Decreto del Poder Ejecutivo Nacional 706/74. Las obras comenzaron el 7 de Mayo de 1974, finalizando el montaje 6 años después.
- A mediados de 1981, concluyó el montaje de la Central.
- El 13 de marzo de 1983 se obtuvo la primera criticidad; el 25 de abril la primera conexión a la red, y el 15 de septiembre se alcanzó el 100% de potencia.
- El 20 de enero de 1984 se inició la operación comercial de la Central Nuclear Embalse. Pasados 31 años, finaliza el primer ciclo operativo de CNE, luego de haber producido y entregado millones de megas de energía en forma limpia, eficiente y efectiva al Sistema Interconectado Nacional.
- En 2005 hasta el 2009, comenzó la Fase 1 del Proyecto Extensión de Vida (PEV) de CNE, que comprendió todo lo necesario para definir el alcance y estimar los costos totales del reacondicionamiento de la planta.
- En 2009, comienza la Fase 2 del PEV que incluye la administración de compras; ejecución de infraestructura; fabricación de componentes; capacitación; planificación y programación.
- El 31 de diciembre de 2015 concluyó el primer ciclo de Operación Comercial de la planta y en enero de 2016 comienza la Fase 3 del PEV, Parada de Reacondicionamiento, que terminó en 2018.
- El 4 de enero de 2019 el reactor de la Central se puso a crítico. Seguidamente, comenzaron las pruebas de distintos niveles de potencia y se verificó el correcto funcionamiento de los sistemas. En mayo de 2019 la central retornó formalmente al servicio.