En el marco de la nueva sección de Enula «Testimonios: la industria nuclear en primera persona», presentamos #Galponero, por Christian Roa.
En la Autoridad Regulatoria Nuclear (ARN) existen muchos sectores creados para cumplir con todos los requerimientos regulatorios para la actividad nuclear y radiológica en Argentina. Entre todos los sectores existe uno muy pequeño que, desde un rinconcito del Centro Atómico Ezeiza, aporta a la regulación con su granito de arena: el Anexo de la ARN, o como se lo conoce con cariño, «el galpón».
La historia del Galpón comienza en la necesidad de la CNEA de tener grupos de ingeniería para dar respuesta en el montaje y prueba de sistemas en distintas instalaciones que se estaban construyendo en el país y en la creación de equipos para monitoreo ambiental, entre otros proyectos.
Ser galponero tiene su mística e historia. Es un sector, que a lo largo de los años, supo dar respuesta a muchas necesidades técnicas para la regulación argentina.
Es importante remarcar que aquí se armó el primer equipo de monitoreo ambiental de aerosoles llamado EMCRA (equipo de monitoreo de concentración de radionucleidos en aire) que luego fue tomado e implementado por el CTBTO para su trabajo en el marco del control de prohibición completa de ensayos nucleares. También aquí se diseñan, fabrican, calibran e instalan equipos para control de monitoreo ambiental. Con la gran ventaja, no solo de poder desarrollar los equipos de acuerdo a las necesidades que se van planteando, sino que también con la ventaja de poder mantener y actualizar dichos equipos sin tener que depender de un proveedor externo.
Durante las Puestas En Valor de Atucha ll y de la Central Nuclear Embalse, se realizaron los seguimientos de sus sistemas de ventilación, resaltando los ensayos de sus filtros HEPA y de Carbón Activado, filtros de muy alta eficiencia que retienen aerosoles, gases y vapores radioactivos. Se realizó el seguimiento de la protección radiológica durante el PEV de CNE. En el Galpón también funciona un laboratorio de pretratamiento ambiental donde se preparan las muestras tomadas para ser medidas; se diseñó y armó un túnel de viento para el ensayo de filtros de alta eficiencia para material particulado.
El objetivo es fiscalizar, trabajando sobre la seguridad nuclear de la instalación y la protección radiológica tanto de los trabajadores de las centrales como del público y del medio ambiente, cumpliendo así con la misión de la ARN promulgada en la Ley Nuclear.
Por acá pasaron muchos compañeros que hoy no están como el maestro Luján Ponce, un gran referente y una gran persona, que supo formar a muchos de los galponeros y con quien montamos equipos de monitoreo de las descargas gaseosas en las chimeneas de nuestras centrales nucleares.
Hoy, con el paso de algunos, y la continuidad de otros, el Anexo de ARN sigue con la misma mística galponera; en donde el trabajo en equipo, la trasferencia de conocimiento y el amor por la Patria son el pilar fundamental para la continuidad de la regulación.
Con el pasar del tiempo, seremos nosotros a quienes les tocará pasar la posta, compartiremos anécdotas y el gran orgullo de haber formado parte de la historia de nuestro querido sector nuclear argentino.
* Christian Roa se presenta:
Soy Técnico Mecánico de la ET Casal Calviño, año 2000. Comencé a trabajar en la Autoridad Regulatoria Nuclear en el año 2007. Ese mismo año hice el Curso de Protección Radiológica -nivel técnico- que dicta la ARN en el CAE. Desarrollé toda mi carrera laboral en el anexo de ARN. Allí me desempeñe en tareas del área de seguridad nuclear y protección radiológica siguiendo los sistemas de ventilación de nuestras centrales nucleares, reactores de investigación e instalaciones clase I y II, especializándome en el control de descargas gaseosas y ensayos de filtros. Durante la puesta en valor de Atucha II y CNE llevé a cabo inspecciones de protección radiológica.