El Centro de Investigación y Desarrollo en Tecnología Nuclear que Rosatom construirá en El Alto, Bolivia, será uno de los mayores proyectos científicos para el país del Altiplano. Enula conversó con la abogada boliviana Natalí Eunice Benítez Anagua y Willy Eliseo Higorre Escalante, estudiante de la Universidad de Nuestra Señora de la Paz, para conocer sus opiniones al respecto, luego de haber sido invitados por la firma rusa a conocer sus tecnologías.
Natalí Eunice Benítez Anagua, abogada
«El Centro de Investigación y Desarrollo en Tecnología Nuclear que se instalará en Bolivia, en la ciudad de El Alto es un punto de partida para el desarrollo de la ciencia, la medicina y la agricultura. Será beneficioso porque posibilitará el desarrollo a través de investigaciones sobre necesidades que presentamos en nuestro país, como la medicina nuclear –que permitirá mejorar la calidad de vida de las personas-, y el fortalecimiento de la agricultura con un mejor rendimiento en producción.
La aplicación médica de las tecnologías nucleares tiene como principal objetivo el tratamiento de enfermedades oncológicas a través de isótopos radiactivos para el diagnóstico a tiempo, lo que resulta fundamental para salvar vidas de pacientes que se encuentren en diferentes fases de enfermedades.
El desarrollo de la medicina nuclear es una necesidad que no solo se presenta en Bolivia, sino en muchos países del mundo. Por la misma mano del hombre vamos cultivando nuevas enfermedades cuyas causas son difíciles de detectar inicialmente y por ende también se complican los tratamientos. La medicina nuclear seguramente será útil en este sentido.
Por otra parte, en lo que refiere a la agricultura, fortalecerá la producción evitando el estrés de las plantas con diferentes bacterias e insectos, y maximizando la calidad de los productos y las capacidades de exportación para el país.
La Corporación Estatal Rusa de Energía Nuclear Rosatom será la encargada de llevar a cabo el proyecto del Centro. Será útil la experiencia de este conglomerado para Bolivia porque Rosatom tiene las bases teóricas e investigativas para llevar a cabo tan importante iniciativa. El nivel de conocimiento científico es un resultado de fuerza científica y productiva, siendo valiosa la experiencia rusa para el desarrollo de nuestro país.
Este Centro profundizará el despliegue tecnológico de Bolivia. Además de las bases teóricas e investigativas sobre temas nucleares, resultaría interesante que facilite otros conocimientos científicos como resultado de fuerzas productivas a efectos de que cuando la instalación se encuentre operativa se haga un uso correcto de sus tecnologías. Para eso se necesitan proyectos de concientización en diferentes ámbitos, de manera paralela a la construcción del Centro, capacitación de personal para su rendimiento eficaz y eficiente».
Willy Eliseo Higorre Escalante, estudiante boliviano de la Universidad de Nuestra Señora de la Paz
«Los beneficios del Centro de Investigación y Desarrollo en Tecnología Nuclear son innumerables para mi país. La producción de radioisótopos posibilitará un mejor control y tratamiento del cáncer en Bolivia. A nivel industrial serán inimaginables las metas que podría ponerse el país, como mercantilizar alimentos completamente seguros y libres de microorganismos ampliando los niveles de exportación.
Desde un punto de vista académico, el Centro será increíble para abrir una nueva puerta al desarrollo científico universitario, a nuevas tecnologías que muchas veces parecían inalcanzables. En esa línea sería interesante para nuestro país que puedan crearse más carreras, maestrías y especialidades que hoy se ofrecen en el extranjero, como ingeniería nuclear, pero no en Bolivia.
Por otra parte, otra gran ventaja será el fortalecimiento de los lazos con Rusia, favoreciendo muchísimo el intercambio de ideas, experiencias y creando fuertes vínculos de amistad. En lo personal me siento muy agradecido por haber tenido el honor de viajar a Rusia, conocer enormes proyectos que parecerían de ciencia ficción, y haberme cruzado con gente tan cordial, tan llena de ideas. Sueño que un día pueda haber una pequeña parte de ese desarrollo en mi país. Este anhelo cada vez parece más posible con las instalaciones de mega proyectos como es este Centro, que se dará gracias a Rosatom.
Qué mejor forma de poder encaminar este gran proyecto con una gran empresa como lo es esta firma rusa, que acumula una enorme experiencia y en este tipo de iniciativas al ser un líder mundial en el desarrollo atómico.
Las poblaciones están en constante aumento, con el consiguiente incremento de la demanda eléctrica a nivel mundial. Es necesario apostar a fuentes más seguras y amigables con el medio ambiente, como la energía nuclear, sustituyendo a la energía fósil. Ojalá algún día en manos de Rusia podamos alcanzar también esa meta».
Medicina nuclear para Bolivia
«Bolivia no cuenta con PET-SCAN, ni tratamientos con radioisótopos. Apenas disponemos de un acelerador lineal que es sumamente insuficiente para la población que sufre cáncer. Los tratamientos se hacen con radioterapias y quimioterapias que necesitan optimizarse y maximizarse, pues las filas de espera aumentan cada día más. El cáncer es una enfermedad creciente en mi país: las medidas para tratarlo se han vuelto insuficientes y anacrónicas.
Creo que es fundamental para Bolivia disponer de un PET-SCAN, tratamientos con radioisótopos y los beneficios que suponen los aceleradores lineales. Prácticamente estas necesidades estarán cubiertas con el Centro proyectado. Por supuesto que también se requerirán capacitaciones y formación de recursos humanos, y ese es otro punto donde se observa una gran necesidad.
Teniendo en cuenta la matriz productiva de Bolivia, este Centro también hará un aporte interesante en agricultura, dado que permitirá desarrollar en el país la tecnología de irradiación de alimentos con el consiguiente aumento en la calidad de los productos exportables. Me parece muy interesante que se desarrollen este tipo de técnicas pero creo que en primera instancia deben socializarse a la población sus beneficios. Debe quedar claro que la tecnología nuclear y sus aplicaciones, como la irradiación de alimentos, es muy segura y útil si se lleva a cabo de forma adecuada y controlada por expertos.
Muchas personas en Bolivia piensan que es insegura por desconocimiento, pero sería una maravilla adoptar este tipo de desarrollo aquí. Al carecer de puertos marítimos estas técnicas podrían permitir más exportaciones para que los alimentos lleguen a su destino frescos, sin descomponerse, como frutas exóticas y verduras.
En lo que respecta a Rosatom, creo que es muy positivo que este conglomerado sea el encargado de llevar a cabo el proyecto del Centro. Sin dudas, será muy útil la experiencia de esta corporación para Bolivia porque es líder a nivel mundial en tecnología nuclear. Llevan décadas de experiencia y desarrollo en la materia. El hecho de que esta iniciativa esté en manos de Rosatom es garantía de calidad, responsabilidad y seguridad.
Este Centro resultará esencial para profundizar el despliegue tecnológico de Bolivia, entre otros beneficios que esto supone. Ojalá este proyecto despierte un mayor interés en nuestras universidades para diversificar las ofertas académicas y que inspire a los jóvenes a formarse en nuevas áreas. Tal como tuve la oportunidad de ver en Sochi: así como el presidente ruso, Vladimir Putin, confía y apoya a la juventud rusa y mundial, mi deseo es que ese valor se traslade a Bolivia, en una verdadera apuesta por las nuevas generaciones».