Durante la Parada Programada 2019 se ejecutaron algunas de las tareas necesarias para la extensión de vida de la planta, que permitirán que la primera central nuclear argentina esté operativa hasta el año 2046.
Como todos los años, la Central Nuclear Atucha I realizó en 2019 su parada programada. Sin embargo, no fue una más de las tantas que se desarrollaron desde 1974, año en el que comenzó a entregar energía para millones de argentinos. Esta vez, muchas de las tareas que se realizaron fueron parte de las necesarias para extender su vida útil.
Atucha I fue la primera central nuclear de América Latina y ya cumplió 45 años de operación. En todo ese tiempo se desarrollaron mejoras significativas, que impactaron en sus niveles de seguridad y en su eficiencia. Para continuar operando hasta el año 2046 se deberán realizar decenas de tareas.
Según lo acordado con la Autoridad Regulatoria Nuclear (ARN), Nucleoeléctrica se comprometió a abordar la operación a largo plazo de la CNAI mediante un plan de acciones graduales dividido en dos etapas:
- Etapa A: comprende desde la Enmienda a la Licencia de Operación otorgada por parte de la ARN el 12 de abril de 2018, hasta su finalización. La enmienda a la licencia permite que la planta opere por cinco años de generación a plena potencia o hasta el 29 de septiembre de 2024, fecha de finalización de la Revisión Periódica de Seguridad vigente, lo que ocurra primero. El objetivo de esta etapa es sostener los niveles de seguridad.
- Etapa B: se inicia con la parada programada de reacondicionamiento, que se estima durará dos años, hasta alcanzar el fin de vida útil de la CNAI. El objetivo de esta etapa es elevar los niveles de seguridad tanto como sea posible.
En la última parada programada se realizaron tareas claves para el inicio de la Etapa B.
Por otro lado, Atucha I solicitó al Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) una Misión SALTO (Aspectos de Seguridad de la Operación a Largo Plazo). La misión, que está conformada por un grupo de expertos, es una revisión de seguridad integral que aborda la estrategia y los elementos claves para el funcionamiento seguro a largo plazo de las centrales nucleares. Se han realizado dos reuniones preparativas a la misión, o “Pre-meeting”, uno en 2016 y otro en 2018, ambos preparatorios para el Meeting 2021.
Tareas del PEV en la última Parada Programada CNAI 2019
La Subgerencia de Extensión de Vida de Atucha I, dependiente de la Gerencia de Ingeniería, planificó una serie de tareas que se realizaron en la última parada programada de la planta, necesarias para la ejecución de su reacondicionamiento:
- Se tomaron muestras de cables y de diferentes materiales ubicados dentro del edificio del reactor, para evaluar su comportamiento en la operación de planta a largo plazo y garantizar que se mantenga la función de los componentes de seguridad nuclear durante la vida extendida, en condiciones operativas normales y ante situaciones anormales como accidentales.
Este último año se realizaron los ensayos para la calificación ambiental de los cables eléctricos tendidos dentro de la esfera de contención de Atucha I. Estos cables pertenecen a sistemas de seguridad para evaluar cuáles de ellos deben ser reemplazados durante las tareas de extensión de vida.
También, se realizó el envejecimiento acelerado de las muestras extraídas para evaluar su comportamiento y se irradiaron cables para analizar cuál será la dosis acumulada a largo plazo. Estas muestras tomadas fueron sometidas a un LOCA Test, ensayo que se realizó en el laboratorio de CNEA del predio del CAREM, en el que se simularon las condiciones de un accidente con pérdida de refrigeración del reactor.
Este ensayo fue el primero en su tipo en Latinoamérica para componentes de una central de potencia y recibió un reconocimiento por parte del equipo evaluador de la misión pre SALTO.
Luego de esta prueba, las muestras se someterán a un ensayo Post-LOCA, en el que se simularán las condiciones de temperatura y humedad posterior a las 24hs del ensayo LOCA.
- Para lograr la extensión del ciclo de vida de la electrónica del sistema de control operativo de la central, se efectuó el primer muestreo de los módulos instalados en planta, para iniciar el desarrollo de los procedimientos de inspección, reacondicionamiento y certificación. El objetivo de las inspecciones es que esos módulos completen su función de modo seguro hasta el fin del ciclo operativo de la CNAI (fin de la Etapa B).
- Se realizaron tareas previas para el cambio del sistema de aislación del Sistema Primario y del Moderador.
- Se verificaron los soportes de diversas cañerías. Luego de este relevamiento, se realizarán cálculos de envejecimiento del material de estos soportes para evaluar su comportamiento a largo plazo.
- Se relevaron las “penetraciones eléctricas”, que son las cajas de conexión o nexos de los cables que parten del Recinto de Distribución de señales y que atraviesan la esfera de contención.
- Se realizó una evaluación de la instalación, para analizar los espacios en los que se pondrán los equipos de limpieza y descontaminación del sistema primario.
- Se extrajeron muestras testigo de hormigón con protección superficial (revestimiento o pintura) de los recintos, para realizar ensayos sobre la protección, de envejecimiento térmico, radiación y LOCA test con el objetivo de verificar su función de modo seguro hasta el fin del ciclo operativo de la CNAI.
La extensión de vida de Atucha I será una obra de ingeniería realizada por personal de Nucleoeléctrica, que permitirá que siga en operación la planta nuclear pionera en América Latina.