Tokyo Electric Power Company (TEPCO) ha solicitado el permiso del organismo regulador nuclear japonés, la Nuclear Regulation Authority (NRA) para comenzar a cargar combustible en la central de Kashiwazaki-Kariwa y poder así reanudar su operación.
La planta, ubicada en Niigata, al noroeste de Tokio, es considerada la mayor del mundo por potencia instalada ya que cuenta con siete reactores tipo BWR que suman unos 8.200 MWe.
La central nuclear japonesa Kashiwazaki-Kariwa, con 7 reactores, es la mayor del mundo por potencia instalada
En el mes de diciembre, la NRA anunció que levantaba el veto que mantenía sobre esta instalación y que fue impuesto a raíz del accidente de Fukushima Daiichi en marzo de 2011.
El organismo regulador, tras llevar a cabo más de 4.000 horas de inspecciones en la planta, justificaba su decisión señalando que TEPCO había llevado a cabo las mejoras requeridas tanto en sus instalaciones como en los protocolos de seguridad.
Tras más de 4.000 horas de inspecciones, el organismo regulador certificó que se habían acometido las mejoras requeridas en la central
Ahora, la empresa eléctrica ha solicitado a la NRA el permiso para comenzar a cargar combustible en el reactor número 7 de la central, paso previo y necesario para que se puedan realizar nuevas inspecciones de cara a su reactivación.
Además del visto bueno del organismo regulador, TEPCO necesitará contar con la luz verde del Gobierno regional de Niigata, donde se ubica la planta.
La propietaria de la central ha solicitado permiso para cargar combustible, paso previo a su reactivación
El Gobierno nipón impulsa la energía nuclear
En abril de 2023 el Gobierno de Japón aprobó una serie de cambios legislativos con el objetivo de permitir que sus centrales nucleares puedan operar más allá del límite actual establecido en los 60 años. Esta iniciativa se enmarca dentro de un plan con el que se pretende reducir las emisiones de CO2 sin poner en riesgo el suministro energético del país.
Con el Proyecto de Ley de transformación verde que el Gobierno japonés presentaba al Parlamento pretende acelerar la descarbonización de la economía y la sociedad. El objetivo marcado establece que en 2030 las tecnologías renovables cubran del 36 al 38% de la demanda eléctrica y la nuclear del 20 al 22%.
Las centrales nucleares japonesas podrán operar más de 60 años con el objetivo de reducir las emisiones contaminantes y asegurar el suministro eléctrico
Actualmente Japón tiene 12 reactores nucleares en funcionamiento, 2 en construcción y 27 parados.
Fuente: foronuclear