La evolución humana ha transformado significativamente los sistemas de producción y consumo, especialmente con la automatización industrial, lo que ha intensificado la explotación de recursos naturales y generado serias preocupaciones ambientales. La contaminación del agua, la deforestación, la extinción de especies y el aumento de emisiones de gases de efecto invernadero son algunos de los impactos negativos.
Entre los principales contaminantes están los plásticos, que contienen aditivos tóxicos relacionados con enfermedades graves como el cáncer. La mayoría de los residuos plásticos terminan en rellenos sanitarios o en el medio ambiente, donde pueden tardar cientos de años en degradarse. Actualmente, sólo el 9% de los plásticos se reciclan a nivel mundial, mientras que el 79%, se deposita en vertederos u océanos. En América Latina, la tasa de reciclaje es aún menor, apenas alcanzando el 4%. Los impactos ambientales de los desechos plásticos se estiman en alrededor de 139 mil millones de dólares anuales.
Para mitigar estos impactos, se investigan tecnologías innovadoras, como el uso de la radiación para reciclar plásticos. Este proceso puede convertir residuos poliméricos en nuevos productos de valor añadido, contribuyendo a una economía circular. Las tecnologías de radiación, basadas en radiación gamma, rayos X y haces de electrones, permiten acelerar la degradación y modificar las propiedades de los plásticos para crear nuevos materiales útiles.
Con el objetivo de demostrar la viabilidad de estas tecnologías de radiación, desde el año 2022, 11 países participan en el proyecto de cooperación técnica RLA1020, titulado «Promoción de la tecnología de la radiación en polímeros naturales y sintéticos para desarrollar nuevos productos, con hincapié en la recuperación de residuos», que cuenta con apoyo del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), a través del Acuerdo Regional ARCAL.
El proyecto forma parte de una iniciativa emblemática del OIEA denominada NUTEC Plastics, que reúne a países y asociados de todo el mundo para combatir la contaminación por plásticos en dos frentes: en el punto de origen, mediante la introducción de nuevas tecnologías para mejorar el reciclaje de los plásticos, y en el océano, donde termina la mayor parte de los desechos plásticos.
A través del proyecto, se ha capacitado a personal técnico de la región y se han iniciado estudios de factibilidad técnica y económica. El proyecto contempla el diseño de una instalación de reciclaje por irradiación a escala de demostración y la transferencia de conocimientos a los países participantes para fomentar la investigación y el desarrollo de productos de valor agregado derivados de residuos poliméricos a nivel piloto, para ayudar a los tomadores de decisiones e inversionistas públicos y privados en la región, quienes eventualmente podrían escalar la operación de la planta de reciclaje a nivel de demostración o comercial.
Precisamente, la reunión intermedia de coordinación de este proyecto se llevó a cabo en Lima, Perú, del 10 al 14 de junio de 2024. Organizada por el Instituto Peruano de Energía Nuclear (IPEN), en colaboración con la Universidad Nacional Agraria La Molina (UNALM), la reunión tuvo como objetivo evaluar los avances logrados por los países participantes, realizar una revisión general del plan de trabajo del proyecto y su impacto potencial, y perfeccionar las estrategias a implementar para cumplir con los objetivos, que también forman parte de los objetivos de NUTEC Plastics.
«Los problemas que se identifican en América Latina y el Caribe son comunes y hay grandes retos para cerrar las brechas existentes, siendo necesario aprovechar las oportunidades que se presentan con el uso de la tecnología nuclear para abordar la contaminación por plásticos, en línea con los conceptos de la economía circular», señaló María Canchari Pacheco, encargada del equipo de cooperación técnica del IPEN. “Resulta sumamente valioso el apoyo que el OIEA brinda a la región en el marco de ARCAL, para apoyar este tipo de proyectos cuyo impacto se da directamente en la población».
El encuentro sirvió para identificar las brechas aún existentes y las oportunidades concretas a nivel regional y nacional al optimizar y fortalecer las actividades planificadas. Durante la semana, los participantes realizaron visitas técnicas a la UNALM y a varias plantas recicladoras dedicadas al manejo de residuos, promoviendo su reutilización y otorgando valor a materiales que inicialmente fueron descartados. Además, se presentaron casos de éxito, demostrando el potencial de estas iniciativas.
“La reunión ha sido muy útil para compartir los trabajos que vienen desarrollando cada país, evaluar los avances y realizar los ajustes necesarios para lograr el objetivo de atenuar la contaminación ambiental generada por los residuos plásticos mediante su reutilización”, afirmó Javier Gago Campusano, investigador del IPEN y contraparte principal del proyecto en el Perú. “En nuestro caso, estamos trabajando junto a la Dra. Mary Flor Césare, contraparte asociada de la Universidad Nacional Agraria La Molina, en obtener un nuevo material compuesto a base de residuos de madera y polietileno, tratados con radiaciones ionizantes para mejorar sus propiedades mecánicas, y evaluar su escalamiento a nivel industrial”, añadió.
A la reunión asistieron representantes de Argentina, Brasil, Chile, Costa Rica, Cuba, Ecuador, México, Panamá, Perú, Uruguay y Venezuela, así como el Oficial Gerente de Programas del OIEA, Facundo Deluchi; el experto Uwe Gohs; y la Oficial Técnica del proyecto, Celina Horak, quien ofreció una Conferencia Magistral sobre “Innovación en tecnología de radiación para un futuro sustentable”, organizada por el Centro Superior de Estudios Nucleares del IPEN.
La colaboración y los avances presentados en Lima demuestran el compromiso regional y global con la búsqueda de soluciones innovadoras para uno de los problemas ambientales más urgentes de nuestro tiempo.
Fuente: ARCAL