¿La radiactividad sinónimo de glamour?
Para imaginártelo tenemos que remontarnos en el tiempo. A los pocos años del descubrimiento de la radiactividad y de sustancias como el radio, se produjo un “boom” de estos materiales, en una época cuando todavía no habían sido profundamente estudiados. En países como EE.UU., Inglaterra, Francia o Alemania pasaron a marcar tendencia y se los incorporaba en distintos productos que se publicitaban comercialmente. Teniendo en mente que un producto puede resultar beneficioso o no, de acuerdo a para qué y cómo se lo use, te invito a hacer un viaje en el tiempo para conocer algunos ejemplos de usos inadecuados.
Productos radiactivos de moda
Con frases como «la radiactividad te hará sentir más sano” se anunciaban algunos artículos industriales. El radio se utilizaba para tratar una serie de problemas y enfermedades como la caída del pelo, la presión alta, el reumatismo, la gota, en forma de pastilla o de inyecciones. Así se ofrecían también tónicos curativos, supositorios que aumentaban la virilidad, condones para un mejor desempeño sexual, cremas oftalmológicas, compresas radiactivas, cremas dentales para blanquear los dientes y uno de los objetos más populares eran las jarras para irradiar agua.
Otro rubro en el que se ofrecían productos con agregados de elementos radiactivos era la industria alimentaria, donde se promocionaban alimentos para animales de granja como un poderoso revitalizante. Y como alimentos saludables se ofrecían mantecas y chocolates con radio incorporado.
Pero la industria en la cual el uso de material radiactivo fue más popular fue la industria cosmética, principalmente en Francia. Se ofrecían maquillajes en polvo, rubores, cremas, champús, jabones y se promocionaban como “productos de belleza basados en la ciencia y en la naturaleza”, que estimulaban la vitalidad celular, activaban la circulación, tonificaban la piel o detenían el proceso de envejecimiento. ¿No podría ser cualquier publicidad actual?
Tampoco la industria de la moda se quedó atrás. Ofrecían lanas, hilos, ropa interior, como por ejemplo “Radiante, la única faja radiactiva estimulante y rejuvenecedora”. Las actividades de entretenimiento también los incorporaron en distintos productos como en cigarrillos, naipes y juguetes. Por ejemplo el pequeño laboratorio de energía nuclear, era uno de los juguetes más elaborados. Estuvo a la venta hasta 1952, pero no fue muy popular por su costo elevado. También se realizaron obras musicales y festivales con esta temática. Los elementos radiactivos se hicieron muy populares y de uso cotidiano. Se los incorporaba de manera industrial y se los podía encontrar en las casas en distintos elementos, como relojes, vajillas, vidrios y adornos.
Surge la protección radiológica
Debieron pasar varias décadas para que se conocieran los efectos que producían las radiaciones ionizantes utilizadas sin los cuidados apropiados. Justamente fueron las llamadas “Chicas del radio” que fueron afectadas por ingerir material radiactivo durante un prolongado uso en la fábrica United States Radium Corporation, quienes pusieron en alerta. Esta empresa operó en Nueva Jersey (EE.UU.), entre 1917 y 1926, produciendo relojes y medidores luminosos a los cuales se les incorporaba una pintura radiactiva que brillaba en la oscuridad. Y así llegó el nacimiento de la protección radiológica.
Estos productos y usos que hemos mencionado anteriormente son un ejemplo excepcional de lo que puede ocurrir, cuando las distintas industrias se lanzan precipitadamente a incorporar los avances científicos guiados por la moda. Pero debemos destacar que el descubrimiento de Roentgen de los rayos X, y los descubrimientos de Becquerel y los esposos Curie sobre radiactividad, a fines del siglo XIX, tuvieron un impacto universal, sobre todo mejorando la práctica de la medicina de forma casi inmediata, y produciendo avances significativos en el conocimiento de la materia y las fuerzas que las gobiernan. Múltiples aplicaciones de la energía nuclear en la generación eléctrica, la medicina, el agro, la ganadería, el ambiente y la industria, bajo normas adecuadas, así lo demuestran.
Extraído por la autora de su video “#2 Curiosidades radiactivas: Cuando la radiactividad estaba de moda” https://www.youtube.com/watch?v=Hmxz7GMAUrY
Del Canal de YouTube «Las radiaciones en la vida cotidiana»:
https://www.youtube.com/@lasradiacionesenlavidacotidian
Por Dra. Lourdes Torres