Reunió a organismos reguladores, empresas industriales y operadores de 33 países.
La Autoridad Regulatoria Nuclear (ARN) participó del lanzamiento de la Iniciativa de Armonización y Estandarización Nuclear de los Reactores Modulares Pequeños (SMR, por su sigla en inglés), promovida por el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA).
Esta nueva iniciativa (NHSI, por su sigla en inglés), impulsada por el director general del OIEA, Rafael Mariano Grossi, se realizó el 23 y 24 de junio de 2022 en Viena, Austria, y reunió por primera vez a altos directivos de los organismos reguladores nucleares y líderes de la industria para facilitar el despliegue seguro de los SMR.
En la reunión de dos días participaron 125 representantes de 33 países que se abocaron a dos líneas de trabajo complementarias – una para los reguladores y otra para las empresas industriales, promotores y operadores – para desarrollar un plan de trabajo conjunto que contemple los posibles enfoques que podrían adoptarse en el proceso de implementación del NHSI.
Por parte de la ARN, participaron de manera presencial el presidente del Directorio, Ing. Agustín Arbor González, y el gerente de Licenciamiento y Control de Reactores Nucleares, Ing. Leonardo Sohebart, quienes integraron la delegación argentina jutno a directivos de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) y de Nucleoeléctrica Argentina S.A. (NA-SA).

La delegación argentina estuvo integrada por la ARN: Agustín Arbor González y Leonardo Sobehart; CNEA: Adriana Serquis y Sol Pedre; NA-SA: Pablo Katz, Fernando Monserrat, Oscar Mazzantini y Antonio Young.
La ARN apoyó la iniciativa y destacó en su presentación, entre otros temas, los siguientes puntos:
– Los beneficios que podría traer el despliegue de los SMR para cumplir con los compromisos ambiciosos pero urgentes del Acuerdo de París para fortalecer la respuesta global al cambio climático, así como a la seguridad energética.
– La construcción y tareas de licenciamiento del Reactor Prototipo CAREM 25, que Argentina está desarrollando.
– Las características de esta tecnología: modularidad, operación natural, alta probabilidad de prevención de accidentes severos y el potencial para mitigar cualquier impacto radiológico, entre otras.
– El cumplimiento de los compromisos jurídicos y políticos vinculantes, como la Convención de Seguridad Nuclear y la Declaración de Viena sobre Seguridad Nuclear, respectivamente.
– Los criterios probabilísticos adicionales que presentan coherencia y consistencia frente a situaciones de seguridad, tanto reales como potenciales, y aplicables a cualquier tipo de reactor. Esta es una de las principales contribuciones que la ARN podría ofrecer para abordar los desafíos regulatorios de los SMR.
– El enfoque de la ARN de utilizar criterios probabilísticos de seguridad, que no está dirigido a realizar un estudio “confirmatorio” a posteriori del riesgo de la instalación nuclear que se está considerando. El objetivo es comprobar “a priori” que la prevención de accidentes nucleares es coherente y consistente con los principios fundamentales de seguridad.
La ARN puso a disposición de esta iniciativa un documento con la propuesta de elaborar un Código de Conducta, adecuado para facilitar el consenso y resolver los problemas asociados a los desafíos regulatorios que presenta la nueva generación de los SMR. El objetivo principal sería simplificar el sistema regulatorio actual, que fue desarrollado para diferentes tipos de reactores y, al mismo tiempo, fortalecer la seguridad, aprovechando las ventajas que ofrecen los SMR en este sentido.
(ARN)